El don de la tierra

Cada elemento nos habla con su voz distinta. Desde la niñez, observamos cómo tocar hace parte del ver, entender, conectar, saber, saborear...

Sin embargo, hoy pasamos la mayoría de nuestro tiempo en los medios electrónicos, usando sólo la visión y el oído para trabajar, estudiar, comunicar... Estudios muestran que cuanto más tiempo pasemos en estos lugares, más tiempo nuestro cerebro necesita para volver a conectar con la naturaleza con todos nuestros sentidos. Cómo equilibrar estos tiempos? Cómo no dejar pasar demasiado tiempo entre cada baño de naturaleza y realidad 3D?

Algo tan simple como tocar, oler la tierra, puede ayudarnos a salir de nuestra mente y conectarnos con el presente. Tocar tierra se puede volver lúdico, creativo, espiritual hasta psicomágico, por ejemplo trayendo tierra de un lugar importante para nosotros (en consciencia y respeto) arena de una playa que nos dio paz para traer paz a nuestro presente, tierra de nuestro lugar de origen para sentirnos enraizados…

Deja que la tierra te hable a través de tus manos, y te enseñará muchas maneras de aliarte con ella.